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| Legislatura: 1861-1862 (Cortes de 1858 a 1863) |
| Sesión: 17 de febrero de 1862 |
| Cámara: Congreso de los Diputados |
| Discurso / Réplica: Réplica |
| Número y páginas del Diario de Sesiones: n.º 59, 1.025 |
| Tema: Enmienda del Sr. Forgas sobre pensiones a viudas de facultativos muertos del cólera. Voto particular a la pensión de Doña Carmen Guerra. Elección de nuevo Sr. Presidente |
El Sr. SAGASTA: Voy simplemente a decir dos palabras para rectificar. Yo no he querido poner en duda la buena fe que tuviera el cura párroco al expedir esa certificación de defunción; pero el Sr. Forgas sabe muy bien, así como los Sres. Diputados, que muchas veces cuando domina la epidemia, en las certificaciones se pone que mueren de todo menos del cólera; Se cree que así se alarma menos a las gentes y que se presentan también menos casos. Es muy posible que ese cura párroco extendiera esa certificación sabiendo que el enfermo había muerto de cólera, y diciéndolo también de la manera que podía decirlo, puesto que añade que el enfermo había muerto con vómitos.
El Sr. Forgas, con motivo de unas palabras que yo he dicho, me ha atribuido intenciones que han estado muy lejos de mi ánimo. Yo no he dicho que no debiera atenderse a las familias de los curas; yo he dicho únicamente que las pensiones son para las mujeres e hijos de las personas que mueren del cólera; y como los curas no tienen mujer ni hijos, claro es que no están comprendidos en la ley. Si lo estuvieran, habría derecho para conceder esas pensiones: mientras no lo estén, nosotros tenemos que atenernos a la ley general de sanidad: el voto particular es contra esa ley, y por eso debe el Congreso desecharle como le desechará.